Viajes en el tiempo provocados por el alcohol

La siguiente es una interpretación libre, subjetiva, poco científica y no autorizada de las teorías de Erich Fromm. Es recomendable leera con moderación.

Son pocas o nulas las investigaciones sobre el principal efecto del alcohol sobre los seres humanos:

Viajes en el tiempo sobre la línea de los sentimientos.

Línea de los sentimientos
Cada persona transita por una “dimensión emocional” construida con varias líneas de sentimientos que contienen en sus extremos emociones opuestas:

Tristeza-Alegría
Miedo-Valentía
Vergüenza-Orgullo
Etc, etc, etc, etc y etc.

De todas esas líneas, una de las que más estorban el normal devenir de la cotidianeidad es la línea Odio-Amor... a pesar de lo difícil que es llegar a los extremos de esa línea.

Sobre el amor...
Erich Fromn explicó en “el arte de amar” , lo difícil que es en realidad alcanzar la vivencia total de ese sentimiento. ODIAR REALMENTE también requiere un esfuerzo similar. En general, rodamos en el centro de las líneas porque no tenemos tiempo o no nos da la gana construir verdaderos sentimientos por otros seres humanos.

Si usted quiere aprender sobre como construir sentimientos duraderos y reales por otras personas, le sugiero que lea el libro citado de Erich Fromn. Pero para los que desean un experiencia pasajera (igualmente válida), el alcohol es una excelente opción ( el sexo es otra opción de la que hablaré en post futuros).

Cuando se ingiere alcohol en exceso, se puede viajar por el tiempo. Los segundos se convierten en horas y los minutos en meses. Puede ser que en cuestión de 10 cervezas, la desconocida de una hora atrás, se convierta en la mujer más bella del mundo( claro... mientras que el néctar etílico recorre las venas del embriagado). He visto muchos ejemplos de ese efecto en los bares:

Gente que no se conocía se da de pichazos con un odio increíble o apretes inesperados en el fondo un pichel.

Le solicito a mi estimable audiencia que aporte sus comentarios o ejemplos que ayuden a solidificar esta teoría.